La primera salida por la zona, dado que entre una cosa y otra se nos hizo un poco tarde, fue al Santuario de Santa Casilda, que se encuentra en un alto, alejado en la localidad de Briviesca-Burgos y el Pozo Blanco, del que se dice que sus aguas son curativas y además hay una tradición: las parejas que lanzan una teja tendrán una niña y la que lance una piedra un niño (esto nos lo contó un vecino del pueblo, el otro día)
Nosotros ya habíamos estado allí hacía unos años, es una excursión breve pero en un agradable lugar de reposo y tranquilidad. Además desde allí y en el camino tienes unas vistas panorámicas geniales de La Bureba.
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