Las Médulas - El Bierzo.
No podíamos dejar de visitarlas y aunque el lunes salió un día frio y lluvioso, continuamos nuestros planes y nos dirigimos hacia allí.
La 1º parada la hicimos en Orellán, donde se encuentra el Mirador a Las Médulas, (desde donde se tienen las vistas que a todos nos viene a la cabeza) Superrrr guay!!! también se ve parte de una de las galerías de su interior que queda cual balcón en un lateral de una de las montañas de tierra roja (nota, se puede visitar la galería previo pago y reserva), nosotros no visitamos la galería, ya que no subimos con la cartera. Desde el Mirador Las Médulas y en el camino hasta el mirador unas vistas impresionantes también de las verdes montañas de El Bierzo.
Tras el mirador nos fuimos hasta el pueblo de Las Médulas, donde aparcamos junto a una curiosa casa. Luego nos dirigimos al centro de recepción de visitantes, donde nos indicaron las posibilidades de ruta que teníamos por Las Médulas y arriesgando y sin paraguas (había parado de llover) comenzamos la caminata, con el objetivo de hacer la ruta circular completa de unos 3km y ¡la hicimos entera!
En la ruta muchos castaños, algunos enormes y con unos troncos alucinantes y huecos pero con el árbol vivo. Las Médulas son unas antiguas minas de oro romanas, a partir del las excavaciones en aquellas minas de oro, quedo este alucinante paisaje natural que merece la pena conocer y recorrer. Vimos también La Cuevona, no es de acceso, pero justo había un grupo con guía y nos colamos 😅
Y la lluvia paró en los momentos precisos, en el mirador y en la ruta casi al completo, cuando quedaban 400m para terminar empezó de nuevo a llover suavemente, aceleramos el paso y llegamos al coche donde justo ya comenzó la tormenta y la lluvia. ¡qué suerte! 😛
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